Por Claudia Ortiz
Yizbeleni Gallardo es una reconocida analista política que
después de haber trabajado con la izquierda y promover sus causas “progresistas”,
se dedica principalmente a defender la vida. Los conocimientos que adquirió
dentro de un alto círculo político le han servido para analizar los hechos
políticos y espirituales que ocurren en el mundo, especialmente en el país.
Algo que defiende y disfruta mucho: Estar con la familia. |
Creció en una familia católica, sus papás Alfonso y Alicia eran
muy devotos, de hecho su abuelo paterno era de Cotija, Michoacán, y fue
cristero, lo que hacía que la descendencia llevara en la sangre ese espíritu de
defensa de su fe.
Desde los tres años de edad tenía fuertes experiencias
espirituales, que en su infancia creía que eran normales, que le concedieron una
relación muy especial y cercana con Dios y la Santísima Virgen María. Todo el tiempo
platicaba con ellos, los soñaba, los veía.
“Para mí era normal y
cotidiano, tener cercanía y experiencias con Nuestro Señor –dice- despertaba en
la madrugada, veía a nuestro Señor, y platicaba con Él.
“Una vez tenía como 6 años, desperté en la madrugada y le
reclamé por qué pasaba tanto tiempo que no venía, tenía experiencias muy
cercanas. También recuerdo despertar, y ver lo que identificaba como monstruos,
ahora entiendo que eran demonios.”
Al paso de los años, esas
experiencias se fueron distanciando hasta desaparecer de su vida.
Su inclinación política
El día de su nombramiento como
Presidente del Instituto Internacional
de Derechos Humanos
(Capítulo México).
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Es politóloga por la Universidad Autónoma de México. Cuando
entró a la Universidad empezó a trabajar en la Cámara de Diputados y conoció vivamente
la política. Tomó inclinación por “la izquierda”, formó un grupo de jóvenes
bastante grande con cuyo impulso fue designada candidata a diputada por el
Distrito XVIII de Tlalnepantla en las elecciones 2009, tenía 21 años de edad,
en ese momento era la candidata más joven de México.
El camino por la
izquierda
Yizbeleni comenzó a crecer políticamente, a “aprender de los
mejores”, ya que cuando empezó a involucrarse con la izquierda, tuvo formadores
“políticamente muy bien empoderados a nivel nacional. Me prepararon para
gobernar, me ideologizaron, y asumí la bandera progresista dentro de la
izquierda”.
Entre los logros que alcanzó -se lee en su biografía- fue asesora
parlamentaria en la Cámara de Diputados de la LX Legislatura en la Comisión de
Relaciones Exteriores; fue asesora de Gobernadores, Senadores, Diputados,
Secretarios de Estado, altos funcionarios de gobierno y de importantes grupos
empresariales.
“Grupo Marcelo”
Con su currículum ascendente en este ámbito político de
izquierda fue invitada al “Grupo Marcelo” cuando Ebrard ya era Jefe de Gobierno
y ya estaban en la carrera por la Presidencia de la República.
Ingresó directamente a la Fundación Equidad y Progreso, que
era desde donde se operaba políticamente, fuera de las actividades de gobierno.
“En la fundación se llevaron las negociaciones para la jefatura de gobierno de 2012, en mi oficina se hizo Miguel Ángel Mancera, nosotros armamos su campaña, así
también para las distintas delegaciones.
Desde la Fundación se promovía la agenda ideológica y así fue
como Yizbeleni comenzó a abanderar los temas progresistas: matrimonio
igualitario y promoción del aborto, entre otros.”
Llega la invitación a
la masonería
Al involucrarse con este tipo de personas del entorno
político, pronto comenzaron a llegarle invitaciones para pertenecer a la
masonería. Recuerda que recibió varias invitaciones y de diferentes personas,
pero como en su momento no sabía de qué se trataba, empezó por investigar.
Buscó en internet y lo primero que le apareció –“nunca se me
va a olvidar - dice- fue una página del Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado
Corazón de María y el punto número uno decía era que todo aquél católico que
entrara a la masonería, quedaría excomulgado, y me impactó tanto porque qué
sería esto, como para perder a Jesús”, de inmediato descartó la idea porque a
pesar de todos los temas en los que se había involucrado y de estar colaborando
con los grandes líderes de la izquierda, “abanderando las causas progresistas,
el matrimonio igualitario entre personas del mismo sexo y la promoción del
aborto” ella se mantenía en su posición católica, asistiendo a Misa los
domingos, e incluso confesándose, aunque ahora comprende que no realizaba un
buen examen de conciencia, ni una buena confesión.
Estaba en la izquierda, “convencida de que era lo que
necesitaba el país” y dentro del grupo era la que se portaba bien, “era la
mocha, porque dentro de algunos grupos había cosas perversas, no voy a
generalizar, no en todos, pero había grupos de sexo, poder, drogas, y yo
gracias a Dios me mantuve siempre como resguardada de todo este tema de
perversiones, sexo, drogas, corrupción, muerte y masonería, como que a pesar de
todo siempre Nuestro Señor estuvo ahí conmigo.”
La política en la masonería
o la masonería en la política
“Muchas personas muy encumbradas están en la masonería,
muchos grupos políticos funcionan en el tema de hermandad a través de la logia,
está más metida en más ámbitos de los que nosotros podemos imaginar y es
perversa, no en todos los niveles, porque hay niveles, odia a Nuestro Señor, es
satánica, no puedo decir que todos los que están ahí son satánicos, muchos
están en el error, engañados, muchos están ahí por interés porque se les ofrece
dinero y poder, hay símbolos, hay mensajes, odian a la Iglesia, hay una tergiversación
del Evangelio y de la verdad, ponen a Satanás como el poseedor de la verdad y
de la luz y de la bondad, y a la Iglesia y a Jesucristo como los grandes
mentirosos como los grandes sometedores, como engañadores, en resumen eso es lo
que yo vi, aprendí a distancia”.
Por no pertenecer a la Masonería, Yizbeleni fue marginada,
acosada, señalada y excluida de las decisiones importantes, “se burlaban de mí y
otro amigo que tampoco entró a la masonería”.
El detonante: la
descomposición
Aunque mantenía una relación con el Señor, dedicándole un
momento de su semana, estaba realmente muy lejos de Él.
“Cuando te alejas de Él es como una espiral, todos los
aspectos de tu vida se empiezan a descomponer, se empiezan a manchar, porque
está uno en el camino de la mentira, eso fue pasando en mi vida personal,
profesional, físicamente, estaba enferma, tenía pesadillas, dolores de cabeza
muy intensos, todo estaba mal en mi vida, nada estaba bien, tampoco
emocionalmente, no estaba bien y empezaron a pasar cosas que empezaron a
prender la alerta…
“El tema de la libertad religiosa, donde quemaron cruces, me
dolió profundamente, fue como que se me empezó a caer la venda, y me empezaron
a segregar, porque además no era parte de la masonería.
“Un día todo eso hizo crisis, empecé en una como búsqueda, me
invitaron a un retiro y aunque había ido a varios, accedí.”
El día que se decide
por el Señor
“Yo iba emocionalmente muy enferma, muy triste, muy mal, es
como estar arriba de una cloaca, de una fosa séptica, es puro olor y gases que
te enferman.”
Yizbeleni considera que el inicio de su proceso de conversión
fue como algo muy parecido a los pretendientes, que te buscan todo el tiempo, “era
un asedio muy fuerte de Nuestro Señor” y así lo vivió durante varios meses,
hasta que le dejó en claro lo que quería de ella:
“Un día que fui a Misa y Nuestro Señor se manifestó completo
después de la comunión, tal vez como se me manifestaba cuando era niña, y me
dice:
-Esta es la respuesta a la pregunta que me has hecho durante tanto
tiempo, sé que vas a luchar en contra del aborto.
-Te equivocaste de persona, ¿cómo me lo pides a mí?
-No te preocupes, no te va a faltar nada.
“Eso fue como un jueves, y un sábado
conocí La Divina Voluntad. Era Semana Santa, y tiempo de transición del nuevo
grupo de gobierno”.
Pero justo mientras vivía los primeros meses de su
conversión, empezó a recibir un ataque muy fuerte en su trabajo, “por maldad me
obligaron a trabajar el Jueves Santo, el viernes me obligaron y no fui, y el Domingo
de Resurrección, de domingo para lunes en la madrugada, despierto y veo al
Señor de la Misericordia, tuve claro que no podía seguir donde estaba y
seguirlo a Él”. Ese lunes renunció a su trabajo y se desconectó totalmente del
grupo político.
El regalo de la Virgen
de la Paz
Después de haber estado posicionada en un alto nivel
políticamente hablando, de un día para otro, ya no tenía nada. Entonces inició
un proceso de crecimiento espiritual muy fuerte y se dedicó a atender a su
mamá.
Ahora comprende que la vida que llevaba la conducía a un
proceso de destrucción, pero cuando volteó sus ojos al Señor, empezó a recobrar
la paz.
Se involucró con nuevas personas, dedicadas a defender la
vida y por estar en esa lucha, comenzó a ser atacada, a pasar dificultades
económicas, no encontraba empleo.
A principios del año 2013, con sus últimos $200 pesos en la
bolsa, se encontró con un amigo que le dijo: “Me dijo la Virgen que vas a ir a
Medjugorgie”.
Para ella fue una total sorpresa, ni siquiera sabía qué era
Medjugorgie, ¿cómo podría ser si no tenía dinero? Pero su amigo le dijo: “no te
preocupes, yo lo tengo dispuesto”. Esto era totalmente extraño para Yizbeleni,
el ambiente en el que había permanecido por tantos años le había enseñado a no
tener fe en las personas, “nadie te daba nada sin pedirte algo a cambio”, pero
su amigo le ofrecía el viaje todo pagado, ella sólo tenía qué tramitar su
pasaporte y sus comidas.
En actitud de fe, terminando ese encuentro, se fue a un
templo y le dijo a la Virgen: “¡Gracias, pero tú sabes que no traigo más que $100
pesos en la bolsa -ya había pagado su desayuno- si quieres que yo vaya, me vas
a poner los medios”. Esto sucedió un martes, el viernes, Yizbeleni ya tenía
empleo.
“Llegué a Medjgurgie,
fue todo un festín espiritual, desde que subí al avión, todo, de principio a
fin, fue regalo tras regalo, una emoción, una felicidad, que no te lo puedo
describir”. A partir de esa experiencia su vida fue tomando cauce, equilibrio,
y se ha dedicado a trabajar por la causa del Señor, “no hay algo que yo haga,
que no tenga que ver con Él”. Ha hecho un intercambio con el Señor, Él se
encarga de sus cosas, y ella de las de Él, “yo mi vida no puedo llevarla, mejor
la pongo en tus manos”.
“Vida para nacer”
Participación de VIDA PARA NACER, en una Marcha por la Vida. |
A Yizbeleni no le tocó el proceso en el que se aprobó la
despenalización del aborto en la Ciudad de México, ella llegó al “Grupo
Marcelo” dos años después de que esto se dio, pero sí -reconoce- tuvo la
posibilidad de manifestarse a favor de la vida, supo que el aborto era algo
brutal, pero los políticos la obligaron a callar, a no externar ninguna
pronunciación, y al final llegó a promoverlo, “cuando tuve que hablar callé,
cuando tuve qué pronunciarme no lo hice”.
No sólo estaba en un error sino en una dinámica de muerte,
“promover el aborto trae sus consecuencias, solo Nuestro Señor puede cuantificar
cuántas vidas debía.
Tras la encomienda del Señor, fundó y es vicepresidenta de la
Asociación Civil “Vida Para Nacer”, cuya misión, según figura en su página, es
“que de manera tácita en el ámbito social, legal, médico, académico, político y
espiritual se respete la vida desde el primer instante de su concepción hasta
su muerte natural , logrando que de México para el mundo se reconozca
formalmente al no nacido como un ser vivo único e irrepetible que desde el
primer instante de su concepción se encuentra en un proceso de formación humana
integral”.
Considera que esta misión, en la cual su hermano menor
Alfonso es su brazo derecho, le fue encargada por el Señor porque conoció cómo
funciona la izquierda en el interior, y toda esa preparación le puede servir
para encabezar la lucha por la vida. “Al
final del día entendí que yo tenía que haber estado donde estuve, visto lo que
vi, aprender lo que aprendí para poder hacer lo que ahora hago”.
La experiencia que ganó participando en la izquierda, “luego
de ponerlo en la luz de la Verdad, me dio una claridad de lo que ocurre en
México en el mundo, veo algo que está ocurriendo y sé por qué y hacia dónde va
el mundo”.
Esto le ha merecido el reconocimiento de su capacidad de
análisis político, por lo que continúa prestando servicios de asesoría, así
como ofreciendo conferencias, aunque está más dedicada a la defensa de la vida.
Por este tema, ha recibido ataques, pero -sostuvo- “si tengo
que asumir consecuencias no me importa, es hablar con la verdad, dar la cara
por nuestro Señor, dar luz, para que muchas personas no cometan el error,
nosotros estamos más allá de lo que ocurre en este mundo, lo más importante es la
salvación de las almas, tratar de que no cometan un error que les pueda
repercutir para su vida”.
La fascinación de los jóvenes por la izquierda
El origen de la palabra “izquierda” viene del propio
evangelio, explica Yizbeleni, “los justos serán colocados a la derecha, y
aquellos que fueron perversos, malos, cabríos, serán colocados a la izquierda y
serán rechazados”.
Políticamente, explica, su origen es revolucionario, surge de
la Revolución Francesa, “es violenta, rompe con el sistema, los jóvenes por
naturaleza, somos antisistémicos, el adolescente por naturaleza tiene que romper
con sus padres para hacer su propia vida … necesitan romper con esta dependencia
para ser independientes”.
Desgraciadamente, para la izquierda es fácil manipular a los
jóvenes porque son muy sensibles, tienen “a flor de piel todas las emociones
utilizan esta naturaleza de ruptura antisistémica … muchos de izquierda han
prostituido el discurso, se les ha dicho que en la izquierda progresista están
las causas de libertad, de justicia, quieren romper con el supuesto sometimiento
que se les ha impuesto aunque no estén sumergidos en lo absoluto”.
Un mensaje para los
jóvenes que aplica para todos
Yizbeleni envió un mensaje a los jóvenes, sin embargo este
principio debe ser clave de vida para todos:
“Que todo lo que vayan a hacer en esta vida pase por la medida
de Nuestro Señor, que todo discernimiento, toda decisión, todo camino, la
medida sea desde la mirada, desde el crisol, desde la perspectiva de Jesús,
aquello que no encaje con Él, por muy bonito que lo pinten, aquello que genere
ruido, que no lo hagan, no se acerquen … la duda es la antítesis de la certeza,
la certeza la da Nuestro Señor. No tengan pena de decir que lo aman, que están
con Él y que quieren seguirlo, de permitir que sea Él el que lleve sus vidas,
que no les dé pena decir que creen en Él, que no les dé pena decir que aman a
la Virgen María, que no tengan miedo de renunciar a lo que este mundo ofrece
por tenerlo a Él, porque es infinitamente mejor. Que se abandonen en Nuestro Señor,
que tengan fe, esperanza, que estemos dispuestos, a ir de su mano, a dar la
batalla, a escucharlo, a recibir su amor, que nos dejemos amar por Él, que
lleva toda la eternidad esperándonos a que nos abramos a su corazón.”
Un nuevo pueblo que da
la espalda a Dios
Se consultó a la politóloga su opinión con motivo de la
verbena popular de espaldas a la Catedral Metroplitana de la Ciudad de México,
tras la toma de protesta del nuevo presidente de la República Mexicana,
ocurrida el 1 de diciembre, durante la cual se llevó a cabo un rito espiritual
prehispánico.
“Fue un acto político, pero también un acto espiritual donde
se rompe con el catolicismo, y espiritualmente se asume una visión y postura
diferente”. El acto en sí pretende posicionar al nuevo presidente del país, como
líder espiritual político, explicó la experta en el tema.
Es una gran ofensa a Nuestro Señor, indicó, porque el pueblo
le dio la espalda a Él y a la Virgen de Guadalupe. Yizbeleni está convencida de
que por ello habrá graves consecuencias políticas, sociales y espirituales para
el país.
P. ¿Pero por qué es para todos, si sólo lo hizo él?
R. Porque lo hizo como presidente investido con la banda
presidencial es una traición de él como líder de este país, es el efecto de
cuando un presidente consagra a su país al sagrado Corazón de Jesús, lo hace él
personalmente, en el nombre de la nación a la que representa, y el país queda
consagrado, es el mismo efecto, pero en sentido contrario.
P. Entonces, Espirtiualmente hablando, ¿México traicionó a
Dios y a la Virgen?
R. Yo creo que sí es una traición, bueno la traición empezó
cuando se aprobó el aborto en la Ciudad de México, pero ésta es la legitimación
de esa traición.
P. ¿Cómo crees que se puede arreglar esto?
R. De forma personal, con nuestra fe, nuestro amor, consagrándonos
a Nuestro Señor, reparando, evangelizando, los que tenemos plena conciencia
salir y dar el mensaje de amor y advertir a la gente sobre el error.
Hacer más sacrificios, negarnos a nosotros mismos, todo lo que
podamos ofrecer en amor a Nuestro Señor, entregando nuestra fidelidad.
Yizbeleni explicó que lo ocurrido es exactamente como la
traición del pueblo judío que lo negó y condenó a muerte, y a pesar de eso
fueron judíos los que propagaron la fe hasta el último rincón del mundo. “Hubo
judíos fieles que lo amaron y que permanecieron con Él hasta la cruz, como San
Juan o María Magdalena, entonces si bien hay una muchedumbre traicionando a Nuestro
Señor, nos corresponde a los que tenemos conciencia dar la cara por Él”.
Llamó a no tener miedo, a encomendarse a la Virgen María para
que nos lleve a Él, “somos la nueva tierra prometida, la Virgen eligió este
país para vivir, si no lo han destruido es porque algo muy especial tiene para
nosotros”.
Claudia Ortiz
@claudiaortizdev
devazquez21@gmail.com
devazquez21@gmail.com
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Impresionante¡ Te felicito Claudia por exponer este tema que estoy seguro interesa no solo a México sino al Mundo porque necesitamos tener la verdad que afecta a todos los países y como países que nos debemos a gobernantes políticos necesitamos promover la fe en Cristo en contra de estas corrientes filosóficas o espirituales que nos asedian sin darnos cuenta... DIOS Y LA VIRGEN nos guarden y guíen para guiar a otros...
ResponderBorrarEs una conversión inspiradora la de esta hermosa joven Yisbeleni Gallardo, el espíritu Santo actúa cuando le abres el corazón
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